La primera en intentarlo fue la hermana mayor, pero no consiguió engañar al rey.
Cuando el rey llegó, le preguntó:
- ¿Te has comido la mano verde?
- Hombre claro. ¡Cómo no me la voy a comer"
- Ahora lo vamos a ver.
Y empezó a llamar: "Mano verde. Mano verde, ¿dónde estás?"
La mano verde contestó: "Debajo de la tejica, debajo de la tejica"
- ¡Pues tú conmigo no te casarás!
Después, llegó la hermana mediana, pero tampoco tuvo suerte, porque la mano verde le desveló al rey que estaba en la basurica. Hasta que llegó la hermana pequeña y tuvo una gran idea ¡Esconderla en la fajica! Y cuando el rey le preguntó:
"Mano verde. Mano verde, ¿dónde estás?"
La mano verde contestó: "En la tripica, en la tripica"
¡Cómo nos gusta repetir esta parte de la historia! Nos la sabemos de memoria.
¿Y si jugamos con sus palabras?¡Qué lio de letras! ¡Somos letras vivientes! Podemos movernos por donde queramos al ritmo de la música, pero cuando se para, tenemos que formar la palabra correcta. ¡FAJICA, TEJICA y BASURICA!
Cuando terminamos nos dimos cuenta que todas las palabras terminaban en ICA, un diminutivo muy usado en Aragón. Así que nos pusimos a pensar en más palabras terminadas en ICO-ICA y surgieron palabras como:
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